DETRÁS DEL VINO: Manuel Cantalapiedra, hijo de Isaac Cantalapiedra, es el enólogo de la bodega familiar en La Seca (Valladolid), cuyos orígenes se remontan aún una generación atrás, en concreto a 1949, cuando el abuelo Heliodoro plantó, con tan solo 15 años de edad, su propio majuelo (viñedo). Más de medio siglo después, y tras 35 años como viticultor, Isaac Cantalapiedra apuesta por una bodega propia, contando con su hijo Manuel como enólogo, continuando así con un linaje de viticultores que conecta a abuelo, padre e hijo. La nueva aventura nació en 2014 fruto del amor por la vid, la agricultura y la tradición, intentando respetar al máximo la variedad y el terruño.
UVAS: Tinta de Toro
¿CÓMO LO ELABORAMOS?: Sus viejos viñedos se encuentran a 780 metros de altitud en Villabuena del Puente, un pequeño pueblo a 20 kilómetros de Toro cultivado de forma orgánica. El nombre del vino deriva directamente de la parcela conocida como Paraje Los Pilones, un viñedo de suelo de arenisca. El 20% de la uva fermentó con el raspón, para después, junto al 80% restante del vino realizar la maloláctica y la crianza de casi un año en barricas francesas. No se le añade sulfuroso y se embotella sin filtrar ni clarificar.
!SIÉNTELO¡ Afrutado e intenso en nariz, con notas de mora, ciruela, cuero y terrosos. Equilibrado, carnoso, persistente, elegante y vivo en boca, con un final largo y agradable.
